AUR alienta a los vacunados a no usar barbijo y tomar brebajes “desintoxicantes”

Esta organización emite estas recomendaciones en diferentes ciudades del país bajo el sustento de que las vacunas contra la COVID-19 son supuestamente “tóxicas”.  Estas teorías no cuentan con un sustento científico  

En grupos de WhatsApp de La Paz, Potosí, Oruro y Tarija circula una publicación con recomendaciones de la organización Acción Humanista Revolucionaria (AUR) dirigido a personas vacunadas contra la COVID-19. Según esta publicación, las vacunas son tóxicas para la salud. Esta versión es falsa.

Bajo la tesis de que las vacunas son tóxicas, recomiendan que los inoculados no usen barbijo, que no se coloquen la segunda dosis y que tomen tres brebajes caseros para desintoxicarse. Todo el contenido de este banner es falso. Ni las vacunas son tóxicas, ni los vacunados deben dejar de portar el barbijo.

Este tipo de afiches, no solo fueron difundidos en las redes sociales, sino que también aparecieron pegados en postes y paredes de ciudades como Sucre, La Paz, El Alto y Tarija. 

La publicación dice lo siguiente:

“Si te vacunaste lee esto

La pseudo vacuna experimental del COVID-19 como lo venimos diciendo desde que comenzó esta falsa pandemia, es un arma contra los pueblos.

Sus componentes altamente tóxicos son semillero seguro de enfermedad y muerte.

Por lo que, si pese a esta continua advertencia haz elegido inyectarte este producto, AUR te sugiere lo siguiente.

1.- No ponerte ninguna otra dosis.

2.- No utilizar barbijo o mascarilla. La falta de oxigenación, sumada a la inspiración de CO2 continuamente, contribuye a la acción nociva de la vacuna.

3.- Consumir los siguientes desintoxicantes:

A) Un vaso de agua tibia con 3 cucharillas de vinagre de manzana y media cucharilla de bicarbonato de sodio. (1 o 2 vasos diarios).

B) Carbón de cáscara de naranja hecha polvo y mezclada en agua. (1 o 2 vasos diarios).

C) Macerar 9 huevos caseros enteros de gallina en jugo de limón exprimido (maceración 10 días). El resultado de la maceración mezclarlo con un litro de ron. Beber una copita pequeña antes de almuerzo y cena, hasta terminar el preparado.

Bolivia Verifica realizó diferentes verificaciones para desmentir estas versiones donde se indica que las vacunas contra la COVID-19 son tóxicas (1, 2).

Las vacunas avaladas contra la COVID-19 no son tóxicas, pues siguieron todos los protocolos de rigor científico establecidos por organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En sus fichas técnicas se puede corroborar que las vacunas no tienen ningún componente tóxico o peligroso para la salud.

No es la primera que esta organización difunde teorías que fueron desmentidas (1, 2, 3).

El subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa respondió a Bolivia Verifica sobre el particular que esta teoría es “totalmente falsa”.

“No es verdad que tengan esas sustancias en ninguna vacuna. Los estándares para las vacunas son más elevados que los que se usan para los medicamentos”, respondió Barbosa en la conferencia de prensa del 18 de agosto. 

En esa oportunidad, Barbosa explicó que primero se verifica si la calidad del fabricante de la vacuna está en el estándar que se quiere. “O sea, no es cualquier fabricante que puede poner una vacuna, antes debe comprobar que sigue todas las buenas prácticas de fabricación”.

Un segundo paso es la verificación de seguridad de esa vacuna. “Si establece desde los ensayos preclínicos con tesis de animales, después con ensayos clínicos en personas, todo eso se va comprobado. Después, con la propia utilización de la vacuna”, indica.

Un tercer proceso verifica si la vacuna es eficaz

Las vacunas que la OMS aprueba para ser utilizadas se han sometido a pruebas y ensayos clínicos a fin de demostrar su seguridad y su efectividad a la hora de controlar enfermedades.

Utilización de barbijo

En la publicación de AUR se sugiere que las personas vacunadas no utilicen barbijo. Esta recomendación atenta contra la salud, tanto del inoculado como de las personas de su entorno.

Los inmunizados deben seguir usando barbijo porque aún pueden contagiarse del virus y contagiar a otros. Si bien, el riesgo se reduce, aún está latente y no utilizarlo, en especial en espacio concurridos, puede conllevar a que se contagie. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) lo explica así:

“Si bien las vacunas contra la COVID-19 protegen de enfermar gravemente y de fallecer por esta enfermedad, no sabemos hasta qué punto evitan la infección por el virus y su transmisión a otras personas. Los datos procedentes de países muestran que las vacunas actuales protegen de la enfermedad grave y la hospitalización; sin embargo, ninguna vacuna protege en la práctica al 100%, por lo que, lamentablemente, se pueden dar infecciones en personas vacunadas”.

La Organización Mundial de la Salud indica que su uso no es perjudicial y que junto a las medidas de bioseguridad ayudan a prevenir contagios del coronavirus.

En anteriores chequeos Bolivia Verifica aclaró que los barbijos no obstruyen las fosas nasales ni causan falta de oxígeno en la sangre, por lo tanto, tampoco ocasionan enfermedades por falta de aire como la hipoxia e hipercapnia.

Las mascarillas tampoco producen cáncer u otros males.

“Las mascarillas deben utilizarse como parte de una estrategia integral de medidas para suprimir la transmisión y salvar vidas”; indica la OMS en su  sitio oficial.

La importancia de la segunda dosis 

Otra recomendación de la publicación de AUR es que las personas vacunadas no deben ponerse la segunda dosis. Esta recomendación puede atentar contra la salud de las personas.

Es importante recibir la segunda dosis en el plazo establecido, como indica la Organización Panamericana de la Salud (OPS). “Si la vacuna contra la COVID-19 que se aplica requiere dos dosis, es importante recibirla de la misma vacuna. Una sola dosis no garantiza la protección esperada”.

El infectólogo mexicano Eric Ochoa-Hein explica en la plataforma Salud con Lupa que la primera exposición genera defensas, pero estas son potenciadas entre más veces son expuestas al microorganismo en cuestión.

“De forma coloquial: ‘la práctica hace al maestro’. Luego entonces, la segunda dosis es un refuerzo para generar mejores defensas. En los estudios de vacunas contra la COVID-19 se ha demostrado que la cantidad de anticuerpos generalmente es mayor después de la segunda dosis”, explica.

También los porcentajes de eficacia aumentan después de la segunda dosis. Aunque los estudios varían entre países, el aumento es generalizado, según reflejan los reportes.

El uso de brebajes

En la citada publicación se mencionan tres brebajes caseros que se pueden consumir para supuestamente desintoxicarse. Si bien, algunos ingredientes se encuentran dentro de la medicina tradicional,  sus beneficios no tienen ninguna relación con las vacunas o el virus de la COVID-19 de manera comprobada. Por otro lado, la ingesta de maceraciones podría causar problemas digestivos.

Las recomendaciones de AUR son infundadas e innecesarias, tomando en cuenta que las vacunas no contienen ningún tipo de tóxico, como pudimos constatar en esta verificación.

Este contenido es elaborado con la colaboración de la OPS/OMS Bolivia.

¿Ya descargaste la nueva app de Bolivia Verifica? No te pierdas ninguna de nuestras publicaciones y ten información de calidad.

Descarga en IOS ?—> https://apps.apple.com/bo/app/bolivia-verifica/id1542454083?l=en

Descarga en Google Play —> https://play.google.com/store/apps/details?id=com.bolivia.verifica

 

whatsapp BV