Ninguna vacuna contra el coronavirus puede “controlar” el cerebro
Los datos de una conferencia que dio un científico en 2018 se utilizan en redes sociales para afirmar falsamente que las vacunas contra la COVID-19 pueden manejar la mente humana y generar cambios o “borrar su memoria”
“Las vacunas fueron diseñadas para controlar el cerebro, afirma un neurobiólogo de la CIA”, bajo ese título circula un mensaje en canales de Telegram bolivianos integrados por usuarios que se oponen a las vacunas contra el coronavirus. El dato es viral, pero es falso, ninguno de los inmunizantes puede controlar el cerebro humano como se indica en estas cadenas.
El mensaje se visualizó más de 5.100 veces y también incluye el siguiente texto:
“Estos receptores de diseño activados exclusivamente por vacunas pueden crear nuevas células. Pueden producir nuevos recuerdos y comportamientos en sus sujetos humanos. También pueden utilizarlo para borrar o incluso vuestra memoria. La tecnología Crispr puede utilizarse para matar solo a determinadas razas de personas vía la edición de ADN”.
A continuación, desmentimos el mensaje parte por parte.
Ninguna de las vacunas puede modificar el ADN de las personas
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) emitieron un documento llamado “Información adicional para personas preocupadas por la vacunación COVID-19”, donde aclararon que ninguno de los inmunizantes contra la COVID-19 puede cambiar el ADN de las personas.
“Algunas de las vacunas COVID-19 son un nuevo tipo de vacuna llamado ARN mensajero, vacunas o vacunas de ARNm. Las vacunas de ARN mensajero enseñan a nuestras células cómo hacer una proteína, o incluso solo una parte de una proteína, que activa la protección dentro de nuestro cuerpo. El ARNm de la vacuna no puede afectar su ADN de ninguna manera”, indica dicho documento.
Bolivia Verifica también indicó que no existe evidencia científica que asegure que las vacunas contra el coronavirus modifiquen el ADN convirtiendo a las personas en “transhumanos” (superar los límites naturales de la humanidad mediante el mejoramiento tecnológico y, eventualmente, la separación de la mente del cuerpo) que serán parte de las compañías farmacéuticas. Si desea saber más sobre este tema haga clic aquí.
La Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud aseguran que las vacunas son seguras y que no tienen la capacidad de modificar el ADN de las personas. A la vez califican la información errónea como un “mito”.
¿Qué es la tecnología Crispr y de qué neurobiólogo habla el mensaje?
La Universidad Nacional de Colombia con sede en el municipio de Palmira indica que la tecnología Crispr es un editor genético que puede modificar o corregir el ADN en las células de cualquier ser vivo.
Esta universidad califica a esa tecnología como un editor y la utiliza en investigaciones para mejorar el potencial de las plantas, hacerlas resistentes a herbicidas, además de aumentar los cultivos de maíz, sorgo, caña de azúcar y arroz.
El neurobiólogo al que hace referencia el mensaje se llama Charles A. Morgan III, la Universidad de New Haven (UNH) describe al estadounidense como: “Exoficial de inteligencia y neurocientífico, psiquiatra forense, director del Laboratorio de Investigación de Seguridad Nacional de la UNH y que cuenta con subvenciones del Gobierno de Estados Unidos”, entre otros.
Morgan fue convocado el 14 de junio de 2018 al Modern War Institute (Instituto de Guerra Moderna) para hablar sobre psicología, neurobiología y la ciencia de los humanos, cuya charla duró casi una hora.
Fue ahí donde habló de la tecnología Crispr, explicando que es un editor que puede usarse para solucionar problemas genéticos.
“Si un niño nace con anomalía genética, con la tecnología Crispr tenemos la sensación de que podemos crear la parte del gen que le falta e ir a empalmarla y eso puede ayudar a que se desarrolla en el útero o que ya sea mayor para que la sustancia faltante se produzca activamente”, explicó en ese entonces.
Morgan también sugirió que esta tecnología se puede usar en los soldados para hacerlos más fuertes y resistentes a distintas condiciones climáticas si estarían en combate.
A la vez, mencionó la posibilidad de implantar “recuerdos falsos” en las personas con el objetivo de hacer que dejen de fumar o que recuperen la memoria; sin embargo, aclaró que solo se trataba de ciencia ficción hasta que la tecnología se desarrolle.
Durante toda su charla, Morgan explicó avances científicos e hipótesis de futuros a los que la ciencia podría guiarnos, pero en ningún momento mencionó nada sobre la pandemia o vacunas contra el coronavirus.
La OMS reportó a la COVID-19 por primera vez el 31 de diciembre del 2019 en Wuhan, China. La citada exposición de Morgan que fue en 2018 no tiene ninguna relación con el coronavirus.
Sus palabras sobre la tecnología Crispr se pueden apreciar a partir del minuto 28:10 del siguiente video, para acceder al idioma español active los subtítulos.
Ninguna vacuna contra el coronavirus puede controlar la mente humana
La OMS y la OPS indican que las vacunas pasaron estrictos controles de seguridad antes de ser aprobadas para su distribución masiva. También aseguran que los inmunizantes son confiables y eficaces, ninguna de estas instituciones describe que las vacunas contienen elementos que vayan a controlar la mente de las personas.
Los CDC estadounidenses aseguran que las vacunas fueron estrictamente revisadas y que no cuentan con microchips que pueden ser rastreados por el gobierno.
Las vacunas tampoco contienen componentes que causan cáncer o abortos, ni grafeno, sustancia que erróneamente se dice que puede ser manipulada a través de ondas radiales para el control de las personas.
Este contenido es elaborado con la colaboración de la OPS/OMS Bolivia.
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