Las vacunas contra la COVID-19 no generan “daños” en la sangre

Un video que circula en las redes sociales asegura de una supuesta afectación con óxido de grafeno a las personas que son inmunizadas contra el coronavirus. Ninguna vacuna avalada contiene en su composición este material

Captura del video que circula a través de WhatsApp.

“¿Cuánto tiempo vivirán los vacunados?” Con esa pregunta comienza un video en el que se indica que todas las personas que se inmunizaron contra el coronavirus solo vivirán “de tres a diez años” máximo, por un supuesto daño generado en su sangre.

Según el video que es compartido en cadena de WhtasApp, las vacunas contienen grafeno y afectan la sangre, agregando que esta afirmación es en base a un estudio de un hematólogo. Estos datos son falsos, mismos que fueron desmentidos en reiteradas oportunidades por organismos internacionales de salud. También hablamos con el Banco de Sangre de Santa Cruz, que de igual forma desvirtuó esta teoría.

El audiovisual tiene una duración de 04:52 minutos y circula en grupos de WhatsApp con alcance nacional integrados por personas que se oponen a las vacunas contra la COVID-19.

A continuación, describimos algunas de las palabras que se mencionan en este material.

“Hay una pregunta que debemos hacernos y es ¿cuánto tiempo vivirán los vacunados?, muchas personas dicen que son comedores inútiles a los que hay que aplicar la eutanasia lo antes posible. La respuesta a esta pregunta es de tres a diez años. (…) Cualquier hematólogo puede verlo en segundos bajo un microscopio y aún más fácil bajo un microscopio electrónico. (…) el óxido de grafeno está en guerra con el corazón, los pulmones, el cerebro y la sangre por el oxígeno. El óxido de grafeno es una esponja de oxígeno que priva al cuerpo del oxígeno necesario y provoca muchas complicaciones (…) todo se puede medir mediante análisis de sangre, cuantas más inyecciones se reciban peor se verá su sangre bajo el microscopio”.

¿Qué es el grafeno?

Según el portal de Graphenano, es el elemento natural más resistente y flexible que se conoce. Se emplea en la industria para elaborar chalecos antibalas, zapatillas, entre otros. También se utiliza en la robótica y en la construcción porque es 200 veces más fuerte que el acero estructural y más duro que el diamante. Puede ser útil en la biomedicina y en la industria alimentaria debido a que es bactericida, es decir, que ningún tipo de bacteria crece en este material, pero sí permite el desarrollo de las células.

Graphenano es una empresa líder a nivel mundial en la fabricación de grafeno a escala industrial.

Después de revisar sus compuestos, se comprobó que ninguna de las vacunas contra el coronavirus de Sinovac, Sinopharm, Pfizer, Moderna, AstraZeneca, Janssen o Sputnik V, contienen óxido de grafeno. Para saber más sobre los ingredientes de las vacunas haga clic en la siguiente nota:

Las vacunas contra la COVID-19 no tienen componentes cancerígenos, abortivos, ni grafeno

El video en cuestión indica que la sangre de las personas vacunadas contra el coronavirus se ve peor después de cada dosis bajo un microscopio y que también se puede observar a través de un análisis de sangre.

Sobre el particular, Bolivia Verifica se contactó con la jefa del Departamento de Promoción y Extensión Social del Banco de Sangre Regional de Santa Cruz, Claudia Salas.

Salas aseguró que realizan diferentes pruebas a los donantes y no se encontró “nada raro” en la sangre de las personas vacunadas contra la COVID-19.

“Para nada, no se ha encontrado nada raro en la sangre de las personas vacunadas contra el coronavirus. Nada nuevo, nada malo. Tenemos aquí el departamento de control de calidad donde se analizan todas las muestras y se hacen las pruebas serológicas y no se ha encontrado nada nocivo en la sangre. Los vacunados pueden donar sangre con normalidad después de 14 días de haber recibido la inyección”, explico la profesional en salud.

En el siguiente video, Salas explica cuál es la importancia de donar sangre y que antes del procedimiento se realizan evaluaciones médicas para saber si una persona es apta para este procedimiento.

La Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud aseguran que las vacunas contra el coronavirus que se distribuyen en la actualidad a nivel mundial son seguras porque pasaron estrictos controles de calidad y que no tienen ningún elemento nocivo para la salud de las personas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que todas las vacunas, incluyendo las distintas disponibles contra la COVID-19, contienen partículas del organismo causante de la enfermedad o las “instrucciones” para hacer esos fragmentos y otros ingredientes que garantizan su seguridad.

“Cada componente de una vacuna cumple una finalidad específica, y cada ingrediente se somete a diversas pruebas durante el proceso de fabricación. En ese proceso se verifica la seguridad de todos los ingredientes,” indica en su sitio oficial.