Es real que Uruguay mantiene una cuarentena responsable sin restricciones
“Ni la gente circula normalmente, ni es que no exista ningún caso”, dice el politólogo uruguayo Nicolás Álvarez al contar a Bolivia Verifica sobre la situación que se vive en ese país, pues circula una cadena por grupos de WhatsApp, resaltando los resultados en esta región, información que tras hacer la verificación, constatamos que es verdadera.
Existen cadenas que resaltan las libertades que tienen los ciudadanos uruguayos en este tiempo de pandemia
“Ni la gente circula normalmente, ni es que no exista ningún caso”, dice el politólogo uruguayo Nicolás Álvarez al contar a Bolivia Verifica sobre la situación que se vive en ese país, pues circula una cadena por grupos de WhatsApp, resaltando los resultados en esta región, información que tras hacer la verificación, constatamos que es verdadera.
“Uruguay le gana al coronavirus sin cuarentena y sin encarcelar a ningún ciudadano”, titula esta cadena que circula en WhatsApp que aparece junto a un enlace a una página web de El Universitario.
“Desde lo económico, el Estado pidió préstamos por 1.400 millones de dólares a bancos regionales para financiar las medidas y creó el Fondo Coronavirus con el aporte del 20 por ciento de los salarios de ministros, legisladores y otros funcionarios públicos”, dice parte de esta información.
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La situación en Uruguay
“Sí, es cierto. El slogan fue ‘si podés, quédate en casa’”, le cuenta a Bolivia Verifica, el politólogo uruguayo Nicolás Álvarez mientras camina apresuradamente por las coloniales calles de Montevideo, la capital.
Este país tiene un acumulado de 991 casos y 61 activos, siendo una de las tasas más bajas de la región, según informa el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae).
Uruguay detectó sus primeros cuatro casos de coronavirus el 13 de marzo, ese mismo día, el Gobierno Nacional declaró “emergencia sanitaria”, con la suspensión de clases y el cierre de fronteras en las horas posteriores.
“Cerraron las fronteras, las escuelas, los coliseos, las universidades, los espectáculos públicos”, recuerda Nicolás de aquellos primeros meses.
La situación fue cambiando y ahora Uruguay se abre lentamente a un retorno a la normalidad, aunque manteniendo medidas de bioseguridad como el distanciamiento social o el uso del barbijo.
“El acatamiento fue excepcional, sino Uruguay no tendría la pandemia controlada”, revela el joven profesional al indicar que la cuarentena no era obligatoria, sino que se apoyó en la “conciencia ciudadana”.
“Quienes teníamos las posibilidades de quedarnos en casa y acceder al teletrabajo no salimos, pero aquellos que viven del día, obviamente lo hacían”, agrega.
El sistema educativo está retornando a las clases presenciales de manera paulatina, primero con las escuelas del área rural, zona donde existe menores posibilidades de contagio.
Al iniciar la cuarentena voluntaria desde el 29 de marzo, las actividades se habían reducido al 79%. Con el retorno gradual a la “normalidad”, esta cifra se redujo a un 66%, según el informe de Google Mobility actualizado hasta el 12 de julio.
“Nunca sufrimos una situación de cuarentena total y obligatoria, se apeló a la libertad responsable, independientemente que se tomaron ciertas medidas”, asegura Nicolás.
Una de las claves del éxito uruguayo, es la realización de test masivos, aislando a tiempo a las personas portadoras del virus.
