¿Qué significa que la Asamblea ya no necesita 2/3 para algunas decisiones?
En la última sesión de la Cámara Alta de la Asamblea Legislativa Plurinacional, los senadores del Movimiento al Socialismo modificaron el reglamento interno de su Cámara ajustando algunos artículos para sustituir la necesidad de aprobación por dos tercios de los representantes y poner en su lugar, que baste sólo con “mayoría absoluta” para tomar ciertas decisiones. La criticada medida busca reajustar las condiciones de gobernabilidad para el MAS que pese a haber conseguido 55% en urnas, no obtuvo los dos tercios en las cámaras.
¿Qué significa “dos tercios en las cámaras”?
La Asamblea Legislativa Plurinacional está conformada por dos cámaras: la alta y la baja; es decir, el Senado y Diputados. El Senado cuenta con 36 representantes, cuatro por departamento. Los diputados son 130, 63 son uninominales, 60 plurinominales y siete corresponden a las naciones indígenas.
La cifra requerida para lograr los dos tercios en la Cámara Alta es 24, el Movimiento al Socialismo logró sólo 21 parlamentarios. Para la Cámara Baja, eran necesario 86 representantes para conseguir los dos tercios, el MAS logró 73. Por tanto, todo apuntaba a que tenía que discutir y llegar a acuerdos con los opositores.
¿Qué artículos se modificaron?
El 27 de octubre de 2020, en la última sesión de la gestión actual de los senadores (donde el MAS tenía 2/3) se modificaron 11 artículos del reglamento interno.
“Artículo 12, 53, 81, 94, 107, 109, 111, 167, 168, 169 y la disposición final segunda del reglamento general de la Cámara de Senadores, debiendo reemplazarse ‘dos tercios’, por ‘mayoría absoluta’”, señala la parte dispositiva de la resolución aprobada anoche y que fue presentada por la senadora Rossio Lima.
Entre las materias que ya no requerirán dos tercios están: remitir impugnaciones contra senadores ante el Órgano Electoral Plurinacional (Artículo 12), creación de Comisiones Especiales (Artículo 53), se podrá modificar el Orden del día (Artículo 81), ya no será necesario dos tercios para Sesiones Permanentes por Materia, por Tiempo o por Tiempo y Materia (Artículo 94), eximir a una propuesta de su cumplimiento del trámite normal (Artículo 107), la moción de Cierre de Debate se podrá aprobar sin dos tercios (Artículo 109), alteración del Orden del Día (Artículo 111), aprobar la concesión de la Condecoración del “Cóndor de los Andes” (Artículo 167), ascensos a Grados Máximos de las Fuerzas Armadas y Policía Boliviana (Artículo 168) y, ratificar los nombramientos de embajadores propuestos desde el Ejecutivo (Artículo 169).
De toda esta normativa, el ascenso de generales de la Policía y las Fuerzas Armadas, la designación de embajadores y la posibilidad de cambiar el orden del día son temas que ha despertado la susceptibilidad entre la oposición. Por otro lado, se modificó también la disposición final que exigía 2/3 para hacer cambios en el reglamento que ahora podrán hacerse por mayoría.
El recién cambiado reglamento no se había modificado desde el 2010 y a criterio del analista político Williams Bascopé buscaba “construir consenso con 2/3 para ciertos temas importantes”. De los tres gobiernos del MAS, los dos últimos (2009-2014) consiguieron los dos tercios en la Asamblea.
¿Por qué hay desconfianza ante la medida asumida?
La premura de la decisión en las últimas horas antes de dejar el mando provoca desconfianza porque son cambios que impactarán sobre los recién electos parlamentarios.
Para el analista Bascopé, se trata de cambios que van más allá de temas administrativos. Por ejemplo, señala el especialista, el hecho de que se conformen Comisiones Especiales con simple mayoría podría desembocar en que se hagan informes beneficiando o perjudicando a conveniencia política. Para investigar determinados casos se crean comisiones constituidas para hacerse cargo de ese asunto específico y se extinguen una vez haya cumplido el objetivo. Por ejemplo, se conformó una Comisión Especial para indagar sobre el caso de los respiradores durante el gobierno de Jeanine Áñez.
Otro tema preocupante es la posibilidad de cambiar el orden del día. Para Bascopé esto significa que podrían hacerlo a antojo y provocar que los parlamentarios opositores no sepan ni a qué están entrando a la Asamblea porque al llegar encontrarían otra agenda para tratar. En ese mismo tenor, el hecho de que para cerrar el debate ya no haga falta dos tercios, podría traducirse en que el MAS por ser mayoría cierre las discusiones sin escuchar siquiera a los opositores.
Pero lo más inaceptable, para el analista es la modificación al ascenso de las fuerzas del orden, ya que, asegura que con esto se podrá “condicionar” tanto a militares como a policías a “demostrar lealtad”.
El cambio en el reglamento del Senado se realizó el 27 de octubre y se tiene previsto el 28 que la Cámara de Diputados realice modificaciones similares a la norma que la rige. Ambos ocurren en la última sesión. De esa forma, los asambleístas salientes dejan a los entrantes la norma a su medida: para ciertos casos no necesitarán buscar consensos.