El caso Vizcarra: ¿por qué citan al presidente Luis Arce a declarar en Perú?

El fiscal peruano que lleva el caso dispuso que se curse mediante asistencia judicial internacional un pliego interrogatorio a fin de que pueda ser respondido por el presidente boliviano en calidad de testigo

Luis Arce Catacora fue citado por la Fiscalía peruana para declarar en un caso que involucra a Martín Vizcarra, expresidente de ese país. En esta nota explicamos en qué consiste el caso y por qué el mandatario boliviano, además de otras exautoridades, fue convocado por la justicia.

¿Qué es el caso Vizcarra?

El expresidente peruano, Martín Vizcarra, es investigado por presuntamente haber recibido sobornos a cambio de obras públicas cuando era gobernador de Moquegua (2011-2014). Los montos de los supuestos sobornos alcanzarían los 621.000 dólares.

Por este caso en noviembre de 2020, Vizcarra fue removido del cargo en un juicio relámpago que desató violentas protestas que dejaron dos muertos y una crisis institucional mayúscula en plena pandemia.

El caso también es conocido como parte de la operación del “Club de la construcción”, según la cual, varias empresas peruanas y extranjeras se beneficiaban con adjudicaciones de grandes obras a través de sus vínculos con autoridades.

En este caso puntual contra Vizcarra, se le sindica de haber recibido sobornos para ejercer tráfico de influencias en favor de dos empresas constructoras. El exmandatario habría recibido un total de 2.300.000 soles (más de 600.000 dólares) a cambio de la adjudicación de dos obras públicas cuando era gobernador regional de Moquegua: las Lomas de Ilo -una obra de irrigación- y el Hospital Regional de Moquegua.

Las empresas que presuntamente le habrían pagado los sobornos son el consorcio llamado ICCGSA-Incot, por la construcción del hospital; y la empresa Obrainsa, por las Lomas de Ilo.

¿Cómo se descubrió el caso?

A mediados de agosto de 2019, la Unidad de Investigación del periódico El Comercio recibió dos documentos sospechosos: una factura con fecha 12 de diciembre de 2013 que correspondía al alquiler de una avioneta por la que la constructora Obrainsa pagó 35.985 soles (unos 9.650 dólares); y una lista de pasajeros, todos de nacionalidad boliviana. El comprobante incluía el itinerario de la aeronave: Lima-Ilo-Lima.

En la lista de pasajeros figuraban nombres de autoridades bolivianas del gobierno de Evo Morales. El entonces ministro de Economía y ahora presidente, Luis Arce Catacora, la exministra de Planificación del Desarrollo, Viviana Caro, entre otras, además de dos funcionarios del canal Bolivia Tv.

La delegación estuvo el 3 de diciembre de 2013 en el terminal portuario de Ilo, donde fue recibida por el entonces presidente del Gobierno Regional de Moquegua (GRM), Martín Vizcarra, tal cual dan cuenta fotografías y reportes de prensa. Allí se observa en una de las fotos la avioneta rentada por Obrainsa. Tres días después la empresa firmó contrato con el Gobierno Regional de Moquegua para la obra Lomas de Ilo.

Desde entonces se ha iniciado una investigación que ha recopilado confesiones de exfuncionarios quienes admiten los supuestos sobornos. Además se ha constatado que ninguna de las dos obras funciona como se esperaba. Lomas de Ilo, no ha cumplido su objetivo de irrigar los campos eriazos; y el hospital de Moquegua, cuya construcción se inició hace seis años, no funciona al 100%.

¿Por qué se cita a Luis Arce y a otros bolivianos?

Según el abogado de Vizcarra, Fernando Ugaz, el requerimiento fiscal de prisión preventiva contra el expresidente sustenta que los funcionarios de Bolivia “viajaron al Perú con dinero producto de coimas”. Por ello, solicitó que se cite a los bolivianos a declarar como testigos.

El fiscal aceptó citar a Arce y también solicitó los testimonios de otras cinco personas, entre ellas la exministra boliviana Viviana Caro; el presidente del Banco Central de Bolivia, Edwin Rojas, y el jefe de Cancillería de la Embajada de Perú en Bolivia, Jorge Manrique.

Vizcarra por su parte, reconoció haber hecho coordinaciones para que el consorcio alquile una avioneta y traslade a los funcionarios de Bolivia en diciembre de 2013, pero aseguró que este trámite fue “totalmente transparente” y que no prueba que él haya recibido algún pago ilícito de esta empresa.

El mandatario señaló que Obrainsa corrió con los gastos del vuelo como parte de la “responsabilidad social” que asumen las empresas al ganar proyectos de licitación.

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