Tarija celebra 203 años, en cuarentena
Tarija vive un aniversario diferente, con sus calles semivacías, sin desfiles y actos simbólicos, debido a la cuarentena que rige en el país por la pandemia mundial del coronavirus COVID-19.
En el departamento hay feriado, pero es uno muy diferente. Los bancos están cerrados y las salidas por números de identificación postergadas para el sábado 18 de abril. Aunque, el tarijeño no pierde su carisma para homenajear de la mejor manera a su terruño.
Pero qué es lo que recuerda, qué conoces de la efeméride de este departamento sureño, acá te damos información básica.
¿Qué se recuerda el 15 de abril?
La celebración se basa en la Batalla de La Tablada ocurrida en la mañana del 15 de abril de 1817, hace 203 años, cuando tropas patriotas se enfrentaron en aquel lugar al ejército realista, consolidando una victoria que marcaría un giro en torno a la lucha independentista, tanto en el sur del continente como en lo que era el Alto Perú, posteriormente Bolivia.
Esta victoria provocó la rendición de los realistas que seguían sitiados en la plaza principal de Tarija. Tras la entrega de armas y prisioneros, hubo celebraciones en el pueblo, según indica el libro Tarija en la Independencia del Virreinato del Río de La Plata de Eduardo Trigo, perteneciente a la Biblioteca del Bicentenario de Bolivia.
¿Quiénes se enfrentaron en la Batalla de La Tablada?
En ella se enfrentaron fuerzas realistas al mando del coronel Mateo Ramírez que era gobernador de Tarija, contra fuerzas independentistas del Ejército del Norte al mando del tucumano Gregorio Araoz De La Madrid, como parte de su expedición al Alto Perú encomendada por Manuel Belgrano.
¿Quién es el “Moto” Méndez y qué papel histórico cumple?
Es conocido históricamente como el “guerrillero chapaco”. Su rostro aparece dentro de los nuevos billetes de Bs 10. El guerrillero chapaco se ganó este apodo porque había perdido la mano derecha. Aunque no existe una versión oficial, la tradición refiere que Méndez se cortó él mismo como arrepentimiento tras haber faltado el respeto a su madre.
En medio de la cuarentena, con dos sacerdotes infectados por el COVID-19 y con miedo por el contagio, así Tarija vive sus 203 años de vida.