Este video no muestra la ejecución de misioneros cristianos en Afganistán

El mensaje de texto que es difundido en WhatsApp ya fue desmentido por Bolivia Verifica el año 2021. El audiovisual data de 2014 y fue grabado en Aleppo, Siria.

Imágenes en video de la decapitación a un hombre por un encapuchado están circulando vía WhatsApp, cuyo texto  indica que 229 misioneros cristianos han sido sentenciados a muerte por los «islámicos afganos», motivo por el cual se pide una cadena de oración; sin embargo, se trata de un bulo.

«Por favor, oremos por los 229 misioneros cristianos que han sido sentenciados a muerte para mañana en la tarde por los islámicos afganos», señala parte de la cadena que circula en grupos de WhatsApp.

La cadena de oración fue atribuida a la misionera Judith Carmona, de quien se indica que está realizando su servicio en África.

El mensaje es compartido en cadena y lleva la alerta de WhatsApp de haber sido «reenviado muchas veces».

La cadena de oración data de 2009 y es falsa

La Agencia Católica de Informaciones (ACI Prensa) aclaró el 8 de abril de 2017 que la desinformación circuló en febrero y noviembre de 2009 a través de correos electrónicos y mensajes de texto (SMS).

ACI Prensa expuso que sí se registró un caso en julio de 2007, cuando un grupo de misioneros fue secuestrado por los talibanes en Afganistán.

La crisis de los rehenes de 2007 tiene que ver con el secuestro en julio de 23 misioneros surcoreanos en la provincia de Gazni de Afganistán por un grupo talibán. Dos misioneros fueron asesinados: Bae Hyeong-gyu y Shim Seong-min. El resto de los misioneros cristianos evangelistas fue liberado en agosto de 2007, después de las negociaciones efectuadas entre el Gobierno de Corea del Sur y el grupo talibán.

Tampoco existe registro del nombre de Judith Cardona en algún servicio misionero en África.

Bolivia Verifica detectó en agosto de 2021 que la publicación más antigua es del 12 de septiembre de 2017 a través de Facebook:

Publicación en Facebook en el año 2017 de la citada cadena.

Las verificadoras AFP Factual, VerificaRTVE, Newtral y El Verificador de La República también desmintieron este contenido.

Video antiguo y descontextualizado

Con la búsqueda inversa de las imágenes se encontraron notas informativas (1, 2 y 3) que registraron el video en noviembre de 2014, mismo que fue grabado en la ciudad de Al-Bab en la Gobernación de Aleppo, Siria.

Por aquel entonces, el Estado Islámico (EI) acusó y decapitó a un grupo de sunitas sirios por quererse unir al Ejército de Siria, leal al presidente Bashar Al Assad, según la descripción del video subido originalmente a internet. El autor anónimo se autodenomina como representante del EI.

Una nota de BBC Mundo explica que los miembros del EI son yihadistas «que tienen una interpretación extremista de la rama sunita del islam y creen que son los únicos creyentes reales. Las decapitaciones, crucifixiones y asesinatos en masa han sido utilizadas para atemorizar a sus enemigos».

El conflicto interno en Siria se mantiene activo hace 12 años, el cual tiene enfrentados al Gobierno de Bashar Háfez al-Ássad con el Estado Islámico y grupos rebeldes. La guerra civil inició el año 2011 como consecuencia de la Primavera Árabe, cuando miles de manifestantes sirios pedían elecciones democráticas, mejoras en la calidad de vida y el fin del denominado clan «Al-Ássad». La familia Al-Ássad encabeza el gobierno sirio desde 1971.

Por todo lo expuesto, tanto el video como el mensaje de texto que circulan en WhatsApp son falsos. La cadena de oración fue desmentida por ACI Prensa y el video fue sacado de contexto.

El mismo video también es compartido en el contexto de la guerra entre Israel y el grupo rebelde Hamás en la Franja de Gaza, pero se ha podido constatar que no tiene ninguna relación con el citado conflicto.

Esta verificación fue realizada en el marco del taller de capacitación Desinformación y uso de la inteligencia artificial, buenas prácticas de verificación, realizado el 27 y 28 de octubre en la Fundación para el Periodismo con la participación de periodistas que llegaron de las diferentes provincias del departamento de La Paz.

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