¡Cuidado con las recomendaciones relacionadas con el dióxido de cloro! Este producto es peligroso para la salud
Continúan difundiéndose mensajes sobre el dióxido de cloro. Existen muchas advertencias que señalan que el consumo de esta sustancia es peligroso
En redes de WhatsApp, Messenger, Facebook y otras circula el testimonio de una señora peruana que asegura que su esposo infectado por COVID-19 fue curado ingiriendo dióxido de cloro, la mujer muestra a su esposo sentado sobre la cama y enseña el frasquito del producto.
Bolivia Verifica revisó decenas, cientos de páginas y encontró que se formaron grupos de personas que comparten sus experiencias con el dióxido de cloro vía Instagram y otros
Aseguran que el dióxido de cloro tiene propiedades para curar todo tipo de enfermedades, entre ellas, el COVID-19.
Sin embargo, no está científicamente comprobado que el dióxido de cloro sea un remedio contra el virus, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre los peligros que existen en su uso y los riesgos para la salud y desde otras instancias médicas también se publicaron argumentos que previenen los riesgos y peligros.
En Bolivia, profesionales médicos alertaron también sobre el consumo del dióxido de cloro, la epidemióloga Jacqueline Cordero explicó el riesgo que existe al eliminar la flora bacteriana por consumir un porcentaje mayor de dióxido de cloro que el que está establecido para purificar el agua.
“Es posible que los seres humanos estemos consumiendo algo de dióxido de cloro en bajas cantidades porque se usa para potabilizar el agua, pero No es un remedio, el cloro es antimicrobiano que se utiliza desde la antigüedad, por eso se usa en el agua de consumo, pero principalmente es bactericida más que virucida, si lo ponemos en esos términos”, dijo la médica
Y explicó que en caso de ingerirse podría tener efectos inversos “al beber agua con un porcentaje más alto de cloro ya provocamos que nuestro sistema inmune, la flora indígena microbiana que ya tenemos en nuestro organismo desaparezca, por tanto, cualquier microorganismo que no llegue inclusive a ser patógeno en sus características naturales podría llegar a producirnos daño, un simple ejemplo: cualquier diarrea. Se debe recordar que la característica viral del dengue, el VIH no tienen cura hasta hoy, pero de alguna manera hemos aprendido a lidiar con ellas. Lo que se aplica para el COVID actualmente es un tratamiento sintomático para estabilizar al paciente según los signos y síntomas”, aclaró.
De la misma manera el epidemiólogo Rubén Castillo, recordó que no existe ningún estudio científico que avale los supuestos “buenos resultados” del dióxido de cloro” al ser ingerido. “Sí eso se hubiese comprobado le habrían dado el nobel en ciencia al médico o científicos que anda por ahí promocionando el dióxido de cloro”, comentó.
El médico Guillermo Cuentas dijo que en internet circula diversidad de información y muchos testimonios de personas que “aseguran curarse incluso haciendo gárgaras, pero no se puede promocionar un producto ni natural ni químico como si fuese el remedio para combatir el COVID-19, eso no es responsable, no siempre lo que a uno puede o podría hacerle bien, les hace bien a todos y hay que recordar que no existe aún un remedio aprobado para el coronavirus”, expresó.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EEUU (FDA), por sus siglas en inglés ha advertido sobre los peligros que existen al consumir dióxido de cloro.
Se ha recibido reportes de personas que experimentaron eventos adversos graves después de tomar un producto de dióxido de cloro, incluyendo:
- Insuficiencia respiratoria causada por una condición grave en donde la cantidad de oxígeno que se transporta a través del torrente sanguíneo se reduce considerablemente (metahemoglobinemia);
- Cambios en la actividad eléctrica del corazón (prolongación del QT), lo que puede llevar a ritmos cardíacos anormales y posiblemente mortales;
- Baja presión arterial mortal causada por deshidratación;
- Insuficiencia hepática aguda;
- Conteo bajo de células sanguíneas, debido a la rápida destrucción de los glóbulos rojos (anemia hemolítica), lo que requiere una transfusión de sangre;
- Vómitos severos; y
- Diarrea severa. (SIC)