Conoce las diferencias entre la viruela y la varicela

La viruela tiene una mortalidad de 3 de cada 10 y la varicela 1 de cada 100.000, según el manual MDS Conocimiento Médico Global 

Aunque la viruela y la varicela tienen nombres y síntomas similares, estas enfermedades son provocadas por virus diferentes.

En este Sin Duda te aclararemos las diferencias que existen entre ambas. Consultamos datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, el manual español MDS Conocimiento Médico Global, el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de España y conversamos con el especialista en pediatría, el doctor Lorgio Rivera.

Las respuestas son las siguientes:

Síntomas

La varicela causa fiebre, dolor de cabeza, fatiga, falta de apetito y erupciones en la piel que dan mucha comezón, como señaló el CDC. Estas últimas, aparecen como puntos rojos y luego se vuelven ampollas con líquido adentro que al secarse se convierten en costras, explica el pediatra Lorgio Rivera.

Esta enfermedad suele evolucionar con rapidez y se considera pasajera sobre todo cuando el paciente es menor de edad, cuando la persona contagiada es mayor de edad suele desarrollar un cuadro un poco más complicado, informa el CDC.

La viruela causa similares síntomas solo que a la fiebre y el dolor de cabeza se le suma las molestias en el cuerpo, cansancio extremo y erupciones en la piel que son diferentes a la varicela.

“Son lesiones, manchas que después se vuelven ampollas, evolucionan a vesículas, y finalmente a lesiones grandes complicadas. Duran entre 14 a 21 días. En cambio, en la varicela son ronchas, pequeñas vesículas, no son tan grandes ni aparatosas”, indica el médico.

Virus

El virus de la varicela se llama varicela zóster y el de la viruela variólico, virus de la variola mayor.

Mortalidad

La viruela causa que 3 de cada 10 contagiados lleguen a fallecer, según el manual español MDS Conocimiento Médico Global. Con la varicela 1 de cada 100.000 personas, según datos del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, el dato lo confirma también el pediatra Rivera.

Contagio

El pediatra Rivero explicó que el nivel de contagio en la varicela es más alto que la viruela, porque se contagia con el contacto directo con alguna de las ronchas del enfermo. Además de ser contagiosa, puede afectar a quienes ya la pasaron. Es decir, que este virus siempre se queda en el organismo y si bien uno genera anticuerpos, puede llegar a tener una reinfección, el pediatra recuerda que atendió casos así, aunque los síntomas son más leves.

Al respecto, el CDC informó que hasta el 90% de quienes estén cerca del contagiado y no hayan pasado la enfermedad o no estén vacunados se enfermarán. “Las personas con varicela son contagiosas desde 1 o 2 días antes de que aparezca el sarpullido hasta que se forme una costra en las lesiones”, señaló esta entidad en su sitio web.

Sobre el tema de la reinfección, mencionó que en la viruela es igual, pero que el contagio no es tanto como en la varicela, ya que el contacto debe ser bastante prolongado. Este se da por contacto con algún fluido del enfermo, como la saliva o la sangre, según se afirmó en el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de España.

Tratamiento

El doctor Rivera explicó que sí existe tratamiento y vacuna para ambas enfermedades; en Bolivia no hay ninguna de estas dosis. De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), las vacunas contra la viruela se dejaron de producir porque en 1980 se erradicó esta enfermedad con una campaña de inmunización a nivel mundial.

Sobre el tratamiento para la varicela sí hay y da efecto, sin problema. Sobre la viruela dice que también hay, pero que los medicamentos son costosos.

El tema de la viruela volvió a ser noticia después  de 40 años; debido a los reportes de casos de viruela del mono en diferentes países. Ante ello, Rivera pide calma a la población para no caer en “entre dichos” de una nueva pandemia porque no es así. Bajo su criterio, este es un virus conocido que puede ser tratado y paliado.