Racismo y homofobia: el clásico paceño que «se juega» en las redes sociales
“Cholivar y strongay” son dos expresiones usadas regularmente por los hinchas de Bolivar y The Strongest, quienes de manera «indirecta y encubierta en forma de mofa», alimentan el odio hacia dos sectores vulnerables de la sociedad.
Marcelo Blanco
En alguna oportunidad, los hinchas de los clubes paceños Bolívar y The Strongest han tenido que escuchar —y quizá hasta hayan usado— los términos: “cholivar” o “strongay”, con la intencionalidad de insultar y denigrar al rival. Ahora, ambas expresiones toman fuerza en las redes sociales y a través de ellas se diseminan narrativas de odio hacia la comunidad LGBTI+ y a la mujer de pollera.
“Cholivar” hace referencia a la chola paceña, mujer representativa de la ciudad de La Paz de orígenes indígenas. Al usar este término, el propósito es referir que el club Bolívar es «la mujer” de The Strongest (pero no cualquier mujer, sino una de menor valía, precisamente, por sus orígenes), tal como grafica el siguiente meme:
“Strongay”, por su lado, hace alusión a la comunidad LGBTI+ (lesbianas, gay, bisexual, trans e intersexual), encubriendo bajo «la mofa» la idea de que hinchas o jugadores fueran gais, bajo la lógica de una sociedad machista y llena de estereotipos.
Acá un ejemplo de un contenido con ese tenor:
Bolivia Verifica recabó publicaciones donde usan de forma despectiva el término “cholivar” en las redes sociales (1, 2, 3):
En los dos primeros casos, se puede ver que se usa la vestimenta y accesorios típicos de la chola paceña para crear los memes. También se detectó un video donde diferentes hinchas hacen uso del término “choli” para referirse a seguidores del club Bolívar:
De igual manera, fueron identificadas publicaciones donde se hace uso del término “strongay” con ironía y sarcasmo (1, 2, 3):
Pero también se elaboran publicaciones donde se conjugan ambas expresiones con agresividad y fines discriminatorios:
En las redes sociales también surge el debate sobre el trasfondo discriminatorio y de odio que cargan estos y otros términos cuando son usados para atacar el rival (1, 2, 3, 4):
Análisis del discurso
El equipo de prensa de Bolivia Verifica conversó con el psicólogo y docente de la Universidad Católica Boliviana “San Pablo” en la materia Psicología Social y Fútbol, Klaus Medina Dos Reis, quien comenta que el uso de estos dos términos es “la expresión de violencia y la forma agresiva de los prejuicios sociales de una comunidad”.
Asegura que los tiempos han cambiado y el uso de las redes sociales generó que estas expresiones acuñadas en las canchas de fútbol trasciendan. “En el fútbol hay un dicho: ‘todo queda en la cancha‘; entonces, uno iba al estadio, gritaba, se desahogaba, salía y todo quedaba ahí”.
Existían “ciertos límites” —agrega— pero hoy, este comportamiento traspasó a las redes sociales y evidentemente tiene otro alcance.
Acota que este fenómeno ha conllevado a que la tensión que se vive en los estadios crezca en otros espacios como el internet, y que de esta manera se esté “manchando la dignidad de otras personas (mujeres de pollera e integrantes de la comunidad LGBTI+) de alguna manera”.
El escritor e investigador argentino Franco Sampietro corrobora la postura de Klaus Medina. Nota descalificativos o narrativas de odio contra sectores vulnerables en el «lenguaje del fútbol».
“Veo que el fútbol es un lugar donde la gente va a liberarse, a hacer su catarsis, a soltarse; entonces, lo que hace es liberar deseos reprimidos, digamos toda esa energía y esa locura y también la maldad que durante la vida cotidiana tiene reprimida, y sale lo peor del ser humano”, menciona.
Acota que esta actitud se ve en la mayoría de los países. “Sale todo ese racismo, maldad, estupidez, el abuso. Para mí no es solo un lugar donde se ataca a las minorías, es la glorificación, la apoteosis del bullying”.
Israel Zambrana, dirigente de la “Vieja Escuela”, que es la barra del club Bolívar, reconoce que este tipo de expresiones alientan al odio y la discriminación hacia las mujeres de pollera y a la comunidad LGBTI+.
En el caso del término “cholivar” dice que es una expresión utilizada hace “muchos años”.
“Viene de hace un tiempo muy largo, cuando The Strongest se creía raza aria, —sus hinchas— se creían superiores a los demás y a la chola la hacían menos”, relata.
Zambrana ve una incoherencia en el uso del término, arguyendo que ambos clubes tienen hinchas de todas las clases, al ser considerados los más representativos de Bolivia por la cantidad de seguidores y por sus participaciones en torneos internacionales.
“Todos descendemos de las cholas y lo que ellos hacen es menospreciar a la mujer de pollera”.
Sobre el término “strongay” considera que de la misma manera no debe ser usado más, y afirma que ellos no lo hacen. “Como barra no utilizamos en nuestros cánticos ‘strongay’, no tenemos ninguna pancarta, ningún mensaje que vaya con eso”.
René Villegas es uno de los representantes de la barra del rival, The Strongest, la cual es denominada «Gloriosa Ultra Sur». Villegas asegura que «ninguna» de las dos barras usa estos términos en los estadios.
Sin embargo, no considera que estos términos representen alguna agresión hacia grupos vulnerables, sino que se trata de dichos de la jerga futbolera. “En ese caso, hay agresiones verbales que no llegan a ser tales, sino expresiones del carnaval del fútbol”.
Menciona que dichos términos siempre van a existir y depende de cómo sean vistos para que no se conviertan en una agresión. Expone que si se observa como una agresión o un insulto se puede pensar que están aludiendo a grupos vulnerables, pero si no, es como una expresión más de lo que llama «el carnaval del fútbol».
“A mí no me ofende porque en el momento que empecemos a ver esto como una agresión va a derivar en agresiones físicas como en otros países”, añade.
Reglamentación que prohíbe la discriminación en los partidos de fútbol
La Federación Internacional del Fútbol Asociado (FIFA) tiene una reglamentación que estipula sanciones para cánticos racistas o discriminatorios en partidos de fútbol.
Seis federaciones de Latinoamérica fueron sancionadas económicamente en 2016 por hechos de este tipo.
En Bolivia se tiene un antecedente reciente, cuando el club Bolívar fue multado, en 2022, por el Tribunal de Disciplina Deportiva de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) por insultos racistas de los aficionados a un equipo rival.
El caso ocurrió el sábado 9 de abril en el estadio Hernando Siles de La Paz, luego de la victoria del conjunto cochabambino de Wilstermann sobre Bolívar por 1-0 en un partido de la octava jornada del torneo Apertura. En ese cotejo, un grupo de aficionados insultó con términos racistas al jugador brasileño Sergio Henrique Francisco, conocido popularmente como «Serginho».
Clásico paceño
Este es uno de los clásicos que fue catalogado como “una de las 25 rivalidades más explosivas del mundo” por la revista especializada Football Derbies, se le denominó de esta manera bajo distintos criterios, como ser el tiempo de vida del clásico, la trascendencia que tienen los partidos, la concurrencia de público en los encuentros y la repercusión, tanto nacional como internacional.
Deporte Total resume que el inicio de la historia de los clásicos paceños se remonta al 21 de octubre de 1927, partido que se disputó en la cancha del Hipódromo; el resultado fue de 2-2.
Tanto el especialista Klaus Medina como el dirigente Israel Zambrana coinciden en que esta reglamentación debe aplicarse con mayor rigor en los estadios de Bolivia para tratar de reducir estas expresiones que generan odio y violencia hacia las comunidades vulnerables.
*Este es un trabajo en alianza entre la Fundación Para el Periodismo de Bolivia, Bolivia Verifica, Proyecto Desconfío y Datos Concepción de Argentina, con el respaldo de la International Fact-Checking Network del Instituto Poynter para desarrollar un proyecto que busca contrarrestar la desinformación y el discurso de odio, cuyo principal fin es de promover el diálogo por medio de una cultura de paz en el país.