Nick Toso destacó el potencial de la IA en el periodismo: “Podemos aprovecharla para apoyar a un electorado más informado”
En la IV edición de la Cumbre Global sobre Desinformación, el periodista estadounidense, CEO y fundador de Rolli App debatió sobre el potencial de la Inteligencia Artificial en el periodismo. Durante dos días, el evento reunió a más de 35 expertos internacionales y contó con más de 1.500 inscritos de 50 países.
Si bien “las redacciones y los periodistas son naturalmente escépticos ante la Inteligencia Artificial” (IA), el CEO y fundador de Rollin App, Nick Toso, consideró que “un enfoque gradual de la integración puede ayudar a las redacciones a adoptar gradualmente estas tecnologías sin alterar los procesos establecidos”. El periodista estadounidense analizó el rol de la IA en las redacciones durante la cuarta edición de la Cumbre Global sobre Desinformación.
Este 18 y 19 de septiembre, periodistas, investigadores, académicos, fact-checkers, referentes de medios y gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, profesores y estudiantes analizaron y discutieron estrategias conjuntas para abordar la problemática de la desinformación. En el evento organizado conjuntamente por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), la Fundación para el Periodismo (Bolivia) y Proyecto Desconfío (Argentina), Toso debatió acerca de si la IA es una aliada o enemiga de los periodistas
En 2020, Toso fundo Rollli, una plataforma que utiliza modelos de IA para analizar grandes cantidades de datos con el objetivo de “apoyar a los periodistas con herramientas de vanguardia que les permitan abordar la representación en los medios de comunicación y hacer frente al problema generalizado de la desinformación en nuestras comunidades”. La idea surgió tras su experiencia como editor en jefe de CNN en español en Washington D.C., donde vio “de primera mano lo cruciales que son las voces diversas y expertas para producir una cobertura informativa de alta calidad”.
“Vi el impacto que puede tener contar con expertos en la materia altamente cualificados en la profundidad y precisión de las noticias, y cómo esto, a su vez, influye en el discurso público”, cuenta el CEO. Además, Toso analiza que durante dicho periodo “el sector ha experimentado reducciones históricas de los recursos de las redacciones, una aceleración del ciclo informativo y el crecimiento de los desiertos informativos”, los cuales considera que son “un caldo de cultivo para la desinformación”.
En por ello que la Rolli incluye funciones como un rastreador de información, “que utiliza algoritmos avanzados para escanear las redes sociales en busca de patrones y anomalías indicativas de campañas de desinformación”, explica Toso. Además, la plataforma cuenta con un panel de control de las elecciones estadounidenses, que tendrán lugar el 4 de noviembre, y próximamente tendrá un detector de bots. “Estas innovaciones reflejan nuestro compromiso no solo de satisfacer las necesidades de los periodistas actuales, sino también de anticiparnos y adaptarnos a los retos a los que se enfrentarán en el futuro”, destaca.
En un contexto en el que “no solo la IA generativa amenaza los puestos de trabajo de algunos periodistas, sino que muchos de los grandes modelos lingüísticos (LLM) se formaron en el trabajo periodístico”, Toso cuenta que “hay muchas dudas sobre la integridad editorial y preocupaciones éticas”, respecto al uso de esta tecnología en las redacciones periodísticas. “Las redacciones y los periodistas están cada vez más preocupados por la amenaza que supone la IA generativa para sus puestos de trabajo. Los LLM se entrenaron utilizando su extenso corpus de trabajo, y aunque estos modelos generan respuestas basadas en ese contenido, a menudo no proporcionan la atribución adecuada, lo que socava el crédito de los periodistas y los flujos de ingresos procedentes del tráfico web”, puntualiza el CEO de Rolli al respecto.
Acerca de la Innovación e IA frente a la desinformación, uno de los cuatro ejes de la Cumbre, Toso señala que “la IA puede agilizar la investigación, identificar patrones y revelar información que de otro modo llevaría horas encontrar, liberando a los periodistas para que hagan lo que mejor saben hacer: contar historias atractivas”. “Al hacer hincapié en la capacidad de la IA para aumentar el proceso periodístico en lugar de homogeneizarlo, podemos ayudar a los periodistas a ver su valor y adoptarla como una poderosa herramienta en su kit de herramientas de información”, comenta.
En este sentido, y “para superar el escepticismo”, el CEO de Rolli destaca que el rol de la IA como “herramienta de apoyo que mejora el trabajo periodístico en lugar de sustituirlo”. “La IA puede agilizar la investigación, identificar patrones y revelar información que de otro modo llevaría horas encontrar, liberando a los periodistas para que hagan lo que mejor saben hacer: contar historias atractivas”, sostiene.
Otros de los ejes de la Cumbre consistió en el fortalecimiento democrático frente a la desinformación. Para Toso, “la IA tiene potencial para desempeñar un papel transformador en los procesos democráticos y electorales”, pero advierte que “también conlleva importantes riesgos que deben gestionarse con cautela”, ya que dicha tecnología “ofrece importantes oportunidades para mejorar la democracia”.
“Puede ayudar a los periodistas a ofrecer información más precisa, oportuna y detallada, conectando a las comunidades y haciendo que los votantes estén mejor informados. La IA puede ayudar a analizar grandes cantidades de datos, rastrear la desinformación y vigilar las tendencias en las redes sociales, proporcionando a los periodistas las herramientas para poner de relieve cuestiones críticas, verificar afirmaciones y garantizar que la información precisa llegue al público”, destaca.
Es por ello que Toso sostiene que para aprovechar “el potencial positivo de la IA” es necesario “establecer directrices estrictas y normas éticas que impidan su uso indebido y promuevan al mismo tiempo su utilización para reforzar el discurso público”. “Si nos centramos en la capacidad de la IA para mejorar la exactitud y accesibilidad de la información, podemos aprovecharla para apoyar a un electorado más informado y comprometido”, remarca.
Sobre la Cumbre
Organizada conjuntamente por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Fundación para el Periodismo (Bolivia) y Proyecto Desconfío (Argentina), la Cumbre Global sobre Desinformación reunió durante dos días a más de 35 expertos internacionales en desinformación. El evento contó con más de 1500 inscritos de 50 países que siguieron los debates y presentaciones con una activa participación en la sala de chat y comentarios.
Desde el Comité organizador, Adrian Pino, director de Proyecto Desconfío y miembro del comité que impulsa esta Cumbre destacó: “La desinformación es un desafío global que requiere una respuesta coordinada y colaborativa”. En esa misma línea, el director ejecutivo de la Sociedad Interamericana de la Prensa, Carlos Lauría, puso el foco en el impacto que están teniendo las campañas de desinformación en las democracias: “El periodismo es crucial para llevar información confiable a las audiencias”. Mientras que Renán Estenssoro, director ejecutivo de la Fundación para el Periodismo, reflexionó: “Ahora que hay una demanda creciente para regular los canales de difusión de contenidos, toca analizar si esto puede o no afectar la libertad de expresión”.
En la próxima semana, el Comité Ejecutivo de la Cumbre Global sobre Desinformación emitirá un Decálogo para marcar los desafíos que representa el problema de la desinformación en la era de la inteligencia artificial.
El evento virtual contó con el apoyo de Google News Initiative, el International Fact-Checking Network, la Embajada de EEUU en Argentina y la Fundación Bertelsmann Stiftung.
También tuvo el respaldo del International Center for Journalists (ICFJ), IJNet e IJNet en Español, Medianálisis, Asociación Nacional de Prensa de Chile (ANP), Fundación GABO, Asociación Colombiana de Medios de Información (AMI), Asociación de Entidades Periodísticas de Argentina (ADEPA), el Knight Center para el Periodismo de las Américas, Naciones Unidas Bolivia, diario Perfil, InfoVeritas, ConverCom y Bolivia Verifica.