En 2022 se usó la desinformación para alimentar la exclusión y el odio a la población LGBTI+
Una serie de contenidos falsos que buscaban responsabilizar y culpabilizar a la población LGBTI+ circularon entre mayo y junio de 2022, muy cerca del tradicional festejo del Día del Orgullo.
Marcelo Blanco
En los meses de mayo y junio del 2022, Bolivia Verifica identificó una tendencia de desinformación dirigida a la población LGBTI+, que se había constituido en blanco de los ataques en las redes sociales con contenidos discriminatorios y tendientes a la exclusión de este colectivo.
Así, la población de Lesbianas, Gais, Transexuales, Bisexuales e Intersexuales (LGBTI+) sintió el dedo acusador alimentado por prejuicios y estereotipos que buscaban hacerles responsables y «culpables» de diversos hechos, no solo sin sustento, sino de manera premeditada para causar daño.
Los contenidos desinformantes estaban relacionados con diferentes temáticas, entre ellas, un nuevo brote de la llamada viruela del mono, una enfermedad cuyo primer caso fue detectado en 1970. Una de las publicaciones que más odio generó fue la difundida por el usuario @NotiAgencyCdmx, quien publicó un tuit donde aseguraba que los homosexuales son más proclives a contraer esta enfermedad.
Esta desinformación la atribuyó a la Dirección General de Epidemiología de México. El contenido fue desmentido por Bolivia Verifica el 4 de junio de 2022.
Un segundo caso —que igual fue llamativo— corresponde al tuit de @elbambinouni, publicado a finales de mayo. En el mensaje hacía énfasis en que que el autor de la matanza de 21 personas en una escuela primaria de la ciudad texana de Uvalde-Estados Unidos, era un transexual.
El usuario adjuntó fotografías del supuesto autor.
Como estos ejemplos, se encontraron otros que generaron comentarios negativos de los usuarios en las redes sociales.
Reacciones agresivas en redes sociales
La mayoría de los comentarios parten de la idea de que la desinformación difundida es real y la asocian con el hecho de que se trata de una suerte de “castigo divino”.
Como se observa, estos usuarios optan por ataques como el decir que “se merecen” sufrir dicha enfermedad debido a su orientación sexual. Son pocos quienes dudaron de los contenidos diseminados o que salieron en defensa del colectivo.
Análisis del discurso de odio
La directora de la Fundación Construir Susana Saavedra analiza que este tipo de desinformación genera odio hacia la población LGBTI+, y tiene un efecto adverso en los avances que se han obtenido hasta ahora para erradicar la homofobia.
“Este es un tipo de desinformación que está impactando muchísimo en varios países del mundo y particularmente en América Latina, y viene de la mano de grupos religiosos o fundamentalistas que tienen la intención de frenar el avance de los derechos de las personas LGBTI+”, afirma.
Detalla que la Fundación Construir identificó en diferentes ocasiones contenidos falsos que atacan a este colectivo. “Vimos que hay páginas que difunden o tergiversan información para compartir datos falsos”, explica.
La finalidad, dice, es generar rechazo hacia las personas de distinta orientación sexual.
Alex Bernabé, exdirector de la Fundación Igualdad, coincide con Susana Saavedra en esta lectura, alertando que estos contenidos reafirman los prejuicios de una sociedad «conservadora y homofóbica».
Complementa que en dicha institución trabajan, precisamente, en combatir el discurso del odio. “En cómo el odio justifica la agresión. Comienzan por asociar todo y piensan que todos los gais son violadores, todos son criminales, luego empiezan a deshumanizar, ya no los creen humanos”.
Como consecuencia, afirma, las personas de este colectivo son vistas como una «amenaza» y la probabilidad de que los ataques escalen a la violencia física es alta.
Recuerda que hay impulsores de este tipo de narrativas de odio, como el excandidato a la presidencia en las elecciones generales de 2020 Chi Hyun Chung. “Asociaba -a la población LGBTI+- con la pedofilia y la prostitución”.
La vicepresidenta de la Coalición Boliviana de Colectivos LGBTI (Coalibol), Carolina Miranda, observa que en estos contenidos falsos se fomenta el odio y se vulneran los derechos de esta población.
“Se sigue asociando a las orientaciones sexuales, expresiones e identidades de género diversas con lo malo, lo criminal, lo patológico y el castigo”.
Indica que esas narrativas están presentes en el discurso conservador y fundamentalista desde “hace mucho tiempo”, para justificar sus prejuicios ante la falta de un verdadero conocimiento acerca de la población LGBTI.
Aclara que es prejuicioso y errado vincular a la viruela del mono con la homosexualidad y recuerda que algo similar ocurre con el VIH-sida. “Se estigmatizó a la población homosexual y noticas así provocaron más odio y agresiones contra la población LGBTI+”.
¿Quiénes son los impulsores de estas narrativas de odio?
Para el director ejecutivo de la Asociación Civil de Desarrollo Social y Promoción Cultural (Adesproc) Alberto Moscoso, estas narrativas son creadas por fundamentalistas, conservadores y principalmente religiosos.
Desde su lectura, son estos sectores los que ponen trabas para el ejercicio pleno de los derechos humanos de la población LGBTI+.
“Si uno se da cuenta, además de sus posteos, las personas que líneas abajo dejan sus comentarios son gente que hace referencia a su fundamentalismo religioso”.
En criterio de Moscoso, estos grupos religiosos buscan la eliminación de políticas públicas progresivas, para castigar a esta población.
Desinformación en mayo y junio
El hecho de que esta desinformación haya sido una tendencia en esos meses, ¿tendrá alguna intencionalidad o fue coincidencia?
Los cuatro especialistas coinciden en que no fue casualidad, sino que todo este movimiento tuvo un propósito. “Tenemos conocimiento de que grupos o movimientos conservadores y fundamentalistas buscan momentos en los que sus noticias generen mayor impacto y junio es el mes del orgullo, por lo que mucha información está centrada en base a esto”, dice Miranda.
Para el especialista no sería sorprendente que haya sido estratégico.
Alex Bernabé recuerda que si bien junio es un mes importante para esta población, también lo es parte de mayo, pues el 17 de ese mes se conmemora el Día Contra la Homofobia y la Transfobia.
“Es una época importante, porque fue en 1992 cuando la Organización Mundial de la Salud retiró de la lista de enfermedades mentales a la homosexualidad”.
Aunque la opinión es diversa en cuanto a si hay o no avances en la lucha por los derechos de la población LGBTI+, todos los analistas entrevistados concuerdan en que estas publicaciones son una señal de retroceso, pese a que cada vez más gente ha aprendido a respetar a este colectivo desde sus derechos.
“En las marchas de LGBTI+ muchos salen a apoyar a esta población, las nuevas generaciones tienen otra connotación de las diversidades”.
Bernabé hace un paralelo y dice que vulnerar los derechos a una persona de la población LGBTI+ tiene la misma connotación que hacerlo con un indígena o un afrodescendiente.
*Este es un trabajo en alianza entre la Fundación Para el Periodismo de Bolivia, Bolivia Verifica, Proyecto Desconfío y Datos Concepción de Argentina, con el respaldo de la International Fact-Checking Network del Instituto Poynter para desarrollar un proyecto que busca contrarrestar la desinformación y el discurso de odio, cuyo principal fin es de promover el diálogo por medio de una cultura de paz en el país.
