El general Zúñiga no dijo que el presidente Arce le ofreció dinero a cambio de la revuelta militar

Este 26 de junio por la tarde, un contingente de militares tomó la plaza Murillo con tanquetas con la amenaza de tomar el control del país, lo que generó zozobra e incertidumbre en la población por varias horas.

En Facebook, el perfil Aldo Martinez compartió este 27 de junio un arte que lleva el logotipo del diario El País de Tarija y una declaración atribuida al general Juan José Zúñiga, excomandante general de las Fuerzas Armadas. Según esta publicación, el militar aseguró que le ofrecieron recompensa (dinero y un viaje) a cambio de tomar plaza Murillo. Sin embargo, la información es falsa. 

El texto del arte que se comparte en Facebook es el siguiente: “Zúñiga al ser aprehendido: El presidente me dijo es necesario preparar un autogolpe para mejorar mi popularidad, serás premiado con mucha plata luego te vas a Cancún“. Este contenido fue compartido 59 veces.

El equipo de Bolivia Verifica revisó las cuentas oficiales de El País y no encontró que hayan difundido tal declaración, más al contrario se encontró un arte similar pero que lleva otra frase:

Al revisar las declaraciones que dio el general Zúñiga, antes de ser trasladado a celdas policiales, se confirmó que en ningún momento aseguró que le ofrecieron dinero y un viaje para tomar la plaza Murillo e ingresar al Palacio Quemado bajo amenaza de tomar el poder.

En palabras de Zúñiga, el presidente Luis Arce le comentó días antes la difícil situación que se vive en el país, por lo que le pedía ayuda para hacer algo que mejore su popularidad. Según el general, la pregunta fue: “¿Sacamos los blindados?”, y Arce habría contestado: “sacá”.

Esto fue lo último que Zúñiga alcanzó a decir antes de ser aprehendido.

Este 26 de junio por la tarde, un contingente de militares cercó y tomó la plaza Murillo con tanquetas y soldados bajo las órdenes del general, quien forzando la puerta del Palacio de Gobierno logró ingresar hasta el hall del edificio antiguo.

Una vez allí, arropado por su gabinete, el propio presidente Luis Arce le increpó por lo lo que venía sucediendo y le ordenó abortar la acción tildándola de inconstitucional. Casi en silencio, Zúñiga abandonó el lugar e instruyó el repliegue militar.

Las autoridades del Ejecutivo denunciaron un intento de golpe de Estado, que fue condenado dentro y fuera del país por diversos gobiernos y organismos. Luego, Zúñiga y otros militares y civiles fueron apresados y ahora son procesados por los delitos de terrorismo y alzamiento armado contra la seguridad y la soberanía del Estado.

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