Arce dice que tasa de desocupación en Bolivia es de 4%, pero no contempla la actividad informal
Un análisis del INESAD para Bolivia Verifica señala que “una parte de la población ocupada en Bolivia prefiere autoemplearse en trabajos precarios a estar desempleada”.
El presidente de Bolivia Luis Arce, durante su discurso al país en el 14 aniversario del Estado Plurinacional, aseguró que la tasa de desocupación en el país es de 4%, mientras que en 2021 fue de 5,2%. Sin embargo, el dato no contempla el empleo informal, que sigue creciendo en el país.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) señaló que el índice de desempleo en Bolivia es de 4.1%, es decir, 0.1% menos de lo que dijo Arce en su mensaje a la nación. Empero, este indicador es una medida muy “imperfecta” por la falta de fuentes laborales dada la significativa informalidad que existe en el país, donde una buena parte de las personas se autoemplean a falta de fuentes laborales formales, según un análisis del Instituto de Estudios Avanzados en Desarrollo (INESAD).
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) también informó en 2022 que en Bolivia, el 80% de las personas trabaja en la informalidad. El 87% de estas personas son mujeres y, de este porcentaje, 4 de cada 10 desempeñan sus actividades por cuenta propia.
“Esta situación se vio exacerbada por la pandemia y la destrucción de puestos de trabajo impulsó a muchas mujeres a emprender, incluso de forma informal, en actividades vinculadas a manufactura, comercio, restaurantes y servicios”, añade el informe de la OIT.
El analista económico Pablo Cuba, quien duda de la tasa de desempleo del Gobierno, dijo que el empleo informal, en países como Bolivia, compensa con el crecimiento y la caída del ingreso familiar “que está dedicada de lleno a los negocios en las calles. Este mercado laboral sigue creciendo”, añadió.
En esa línea, dijo que la cifra del Presidente “no es creíble” y que es “difícil”, principalmente porque estamos saliendo de una dura crisis económica.
Cuba explicó que el sector privado no tiene posibilidades ni condiciones para crear nuevos empleos, porque no existe una reactivación económica real. En cambio, el empleo informal sigue creciendo, insistió.
Además, en la tasa de empleos de no asalariados, es decir, el porcentaje de los trabajadores por cuenta propia u otros no reciben ninguna remuneración y, por lo tanto, están al margen de los derechos laborales establecidos por la normativa laboral boliviana.
Con la recuperación de la economía, anunciada e implementada por el Gobierno, no se aprecia una reversión significativa: “en promedio, en los últimos seis meses de información (junio-noviembre del 2022) el porcentaje llega a 59.8%; mientras que en ese periodo de meses en 2019 era de 56.9%. Esto muestra que, a falta de puestos laborales, una parte de la población ocupada en Bolivia prefiere autoemplearse en trabajos precarios a estar desempleada”, dice el análisis elaborado por la Fundación INESAD para Bolivia Verifica.
El analista económico Jorge Akamine dice que las cifras de desempleo en Bolivia siguen bajando, pero explica que esto no significa que se haya recuperado la calidad de ingresos económicos del empleo. “La gente que ganaba Bs 5.000, ahora está ganando 3.000”, acotó.
Para Akamine el crecimiento de la actividad informal en Bolivia es del 62%, según un estudió que realizó y que será conocido en las próximas semanas.
Antecedentes
En su mensaje por el Día del Estado Plurinacional de Bolivia, Arce aseguró que el Modelo Económico Social Comunitario Productivo marca el camino de la recuperación de la estabilidad y de la esperanza del pueblo boliviano.
“Nuestro modelo económico tiene la gran virtud de no solo mirar hacia afuera, sino apostar por la dinamización de la demanda interna, que es lo que nos permite afrontar las crisis económicas internacionales de una mejor manera”, sostuvo Arce
Entre los temas sociales, ponderó la baja de la tasa de desocupación a un 4% y aseguró que más de 214.000 personas dejaron de estar desempleadas.