Alumbrado público con bolsas plásticas: una alternativa para reducir la inseguridad ciudadana en el Pasaje de los Gallos
Este céntrico y concurrido punto de la ciudad es la única vía que conecta de manera directa El Prado con la zona de San Pedro. La finalidad del proyecto es brindar mayor seguridad a los peatones, particularmente por las noches, pero además contribuir a reducir la contaminación medioambiental.
Paola A. Palacios Negrete
Una de las principales causas de inseguridad ciudadana es la falta de alumbrado en espacios públicos, así lo establecen diferentes estudios. En pleno corazón de La Paz, el Pasaje de Los Gallos, es decir aquellas famosas gradas que conectan la Avenida 16 de Julio (El Prado) con la calle México, puede resultar peligroso e intimidante, en buena medida, por esta razón.
Por eso y debido a su importancia para el flujo de transeúntes, una iniciativa mancomunada plantea una solución de múltiple impacto que podría replicarse en otras zonas de la ciudad. Se trata del proyecto “Rehabilitación de las gradas del Prado: sombra por el día e iluminación por la noche”.
Pero, ¿por qué el alumbrado público es clave para disminuir la inseguridad ciudadana? Varias fuentes confirman la relación entre la delincuencia y la falta de luminarias; una de ellas es un análisis genérico realizado para el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre esta temática, y en el ámbito local, una encuesta aplicada por el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP). Se suman a esto diversas notas de prensa sobre esta problemática en el municipio y un sondeo llevado a cabo por Bolivia Verifica, que corrobora esta percepción.
Según el análisis realizado por Patricio Domínguez y Kenzo Asahi en Santiago de Chile para el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), los delitos disminuyen en 20% al contar con una hora más de luz solar durante los días de primavera, especialmente cuando de robos violentos y de vehículos se trata. A su vez, este estudio encontró que el cambio de horario en otoño, cuando oscurece más temprano, causa un incremento de magnitud similar de la delincuencia, lo que demuestra la relación entre la cantidad de iluminación y la actividad delictiva.
Por otro lado, la sexta Encuesta de Victimización y Percepción de Seguridad en la Ciudad de La Paz 2021 (EVPS), elaborada por el GAMLP, revela que una de las principales razones para considerar a una zona como de alta inseguridad o mayor riesgo es, precisamente, la falta de alumbrado público. Además, el horario en que se registra mayor número de delitos, faltas y contravenciones a la ley es durante la noche, de 18:00 a 23:59.
Captura de pantalla de los resultados mencionados en la Encuesta de Victimización y Percepción de Seguridad
en la Ciudad de La Paz 2021
Ese año, el entonces director de la fuerza anticrimen paceña, coronel Douglas Uzquiano, explicó que el personal del Departamento de Análisis Criminal e Inteligencia (DACI) concentra los patrullajes preventivos en determinados horarios y en los lugares donde más delitos se cometen: las plazas Pérez Velasco, San Francisco, Garita de Lima, San Pedro y Avaroa, y las avenidas Montes, Buenos Aires, América y El Prado, además del Barrio Chino.
Uzquiano, quien dio una entrevista a Ahora El Pueblo dijo: “Alertamos a la ciudadanía para que deje de ir por esas zonas (…). Solo pedimos a la gente que esté atenta a lo que pasa a su alrededor, que evite transitar en horarios nocturnos, que vaya por calles iluminadas, en ningún caso solos y no ostenten sus objetos de valor”.
A su vez, en abril de 2022, el presidente de vecinos del macrodistrito San Antonio y vicepresidente de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) La Paz, Juan Carlos Claros, indicó a dicho medio estatal, que los vecinos están preocupados por la seguridad de los niños, niñas y jóvenes que transitan por las calles con poca iluminación para retornar a sus domicilios.
En la misma línea, el representante del macrodistrito Cotahuma y segundo vicepresidente de la Fejuve La Paz, Osmar Arce, dio a conocer que “todos los días los vecinos del lugar sufren asaltos y robos por la falta del alumbrado público”. Según dijo Arce a Ahora El Pueblo, esto se debe a que los antisociales se esconden en lugares donde no hay luz.
Hacer del pasaje un mejor lugar
El Pasaje de los Gallos se encuentra en pleno centro paceño, perpendicular a El Prado. Es la única conexión directa que tiene la Avenida 16 de Julio con el popular barrio de San Pedro. Se trata de un acceso conformado por varios escalones, coloquialmente conocidos como las “gradas de El Prado”, “las gradas de las tucumanas o de los gallos”.
Su denominación se debe a esculturas instaladas por el expresidente Jaime Paz Zamora en los años 90, explicó en una entrevista de Bolivia Verifica Guillermo Mallea, uno de los fundadores y actual director ejecutivo del Movimiento Pro Pacha, una organización ambiental de triple impacto.
Mallea señaló que este pasaje es un sitio patrimonial con al menos 200 años de antigüedad, su piso está revestido de una piedra especial que solo se encuentra en el departamento de La Paz.
Lo que quizá muchos desconocían y Maella explicó es que El Prado paceño pertenece a la jurisdicción de dos macrodistritos: el carril de bajada corresponde al Macrodistrito de Cotahuma y el de subidas, al Macrodistrito Centro.
La propuesta del Movimiento Pro Pacha es embellecer y devolverle seguridad a este punto clave de tránsito peatonal en la ciudad. Con ese fin y en el marco del programa municipal Ciudad de Mil Colores, desarrolló el proyecto “Rehabilitación de las gradas del Prado”, consiguiendo asociarse con el Colectivo de Arquitectos Radical y la propia Alcaldía de La Paz.
Se habla de “rehabilitación” ya que se busca cambiar la percepción de la gente sobre este lugar para hacerlo más seguro.
El plan consiste en la construcción e instalación de unas estructuras (una suerte de techos flotantes) que cubrirán el Pasaje de los Gallos; las piezas serán fabricadas con 10.000 bolsas blancas de plástico recicladas, que serán trenzadas para conseguir brindar sombra durante el día e iluminación por la noche. ¿Cómo se logrará esto? El tejido de las cubiertas incorporará cientos de luces led que, además de ahorrar el consumo de energía y ser más duraderas, iluminarán toda el área desde el atardecer. La imagen que ves a continuación, te dará una idea.
Imagen brindada por Mallea al equipo de Bolivia Verifica.
El coordinador del Observatorio Municipal de Seguridad Ciudadana, Hermógenes David Carrillo, manifestó que proyectos de este tipo en espacios que no cuentan con alumbrado público son muy importantes, pues la falta de iluminación es un factor determinante en los índices de delincuencia. En el caso de La Paz, la cifra es preocupante, a pesar de no haber incrementado más de dos puntos en porcentaje desde 2019.
Los datos reportados en la sexta EVPS 2021 dan cuenta de que la inseguridad se registra mayormente en el distrito 7 con el 69,6% (Max Paredes) y el distrito 6 con el 68% (Cotahuma), siendo que el 40% de paceños participantes considera que las vías públicas son los lugares donde ocurren más agresiones. La Avenida 16 de Julio (El Prado), conformada por los macrodistritos Centro y Cotahuma, se encuentra en segundo lugar entre los 10 sitios con mayor incidencia de delitos.
Captura de pantalla de los lugares considerados los más peligrosos por macrodistritos
El equipo de Bolivia Verifica realizó un sondeo a través de redes sociales con 50 personas para conocer, específicamente, su percepción sobre los niveles de inseguridad en este pasaje. Los resultados señalan que el 70% considera que estas gradas no son seguras, indicando que el horario de ‘mayor peligro’ es de 19:00 en adelante. El 72% vincula la inseguridad en el lugar con falta de luminarias públicas y el 84% asegura que iluminando el lugar se puede mejorar la seguridad ciudadana.
Captura de pantalla de los resultados del sondeo.
Un proyecto de triple impacto
Pro Pacha junto a su socio, el “Colectivo de Arquitectos Radical”, diseñó el proyecto de mejoramiento del Pasajes de los Gallos y elaboró una propuesta considerando la reutilización de 10.000 bolsas blancas plásticas, bajo el mensaje: seguridad, embellecimiento y medio ambiente.
“Si son utilizadas de manera inteligente y creativa se puede hacer de ese lugar un espacio bonito que se luzca en (los post de) Instagram. El objetivo es lograr un efecto como el que se consiguió en la calle Sagárnaga con los paragüitas, pero de otro estilo; el mismo efecto, pero con otro enfoque, otro concepto”, afirma Mallea.
Un tema de análisis fue la cualidad patrimonial de dicho espacio, pero al no ser una intervención directa y no afectar la estructura, se acordó que no existía impedimento para su implementación. Así también, se quedó que, al tratarse de una estructura removible, esta podría ser transportada a otro espacio, en caso de no resultar o de no ser bien aceptada.
La meta es instalar y estrenar las estructuras durante el primer semestre de 2023, tiempo que dependerá del apoyo y de la mano de obra técnica comprometida por el macrodistrito Cotahuma. Por ahora, el 60% de la obra ya se encuentra lista gracias a la participación de al menos 200 personas que han colaborado en diferentes jornadas y desde diferentes organizaciones: Rotaract Club, AIESEC, estudiantes de arquitectura de la Universidad Mayor San Andrés (UMSA) y de la Universidad Católica Boliviana (UCB).
Se necesitan cerca de 80 personas para la edificación de cada cubierta, infraestructura que demanda entre 2.000 y 2.500 bolsas plásticas y que se puede concluir en una jornada de entre 7 y 8 horas de trabajo.
Lo que aún está en evaluación es “el tiempo de vida” de estas bolsas, factor que se sujeta a las condiciones climáticas. Según datos de los arquitectos que apoyan en Pro Pacha, es posible que en 4 a 5 años se requiera recolectar y restaurar espacios que se hayan malogrado.
Una vez implementada la estructura, los aliados realizarán una evaluación para ver cómo asimila el proyecto la población, si la gente transita más por el lugar y otras percepciones acerca de los beneficios que puede traer.
Una de las fortalezas del proyecto es, precisamente, el haber logrado un acuerdo interinstitucional que garantice la ejecución del plan con una intervención público-privada. Por un lado, Pro Pacha, junto a organizaciones civiles (como arquitectos), se compromete a: ayudar en la recolección de bolsas, diseñar la estructura y colaborar en toda la logística. Mientras que el gobierno municipal se responsabiliza de comprar los materiales que hagan falta y brindar apoyo con mano de obra especializada para armar los techos; esto último fue asumido por la Subalcaldía de Cotahuma.
De igual manera es parte del convenio la Secretaría de Medio Ambiente a la que se solicitó su apoyo a fin de intervenir en la mejora de los jardines del lugar.
Sobre el Movimiento Pro Pacha y el proyecto
El Movimiento Pro Pacha es una organización ambiental de jóvenes voluntarios que realiza proyectos de triple impacto (económico, social y ambiental) para la concientización y preservación del medio ambiente, impulsando la conservación y restauración ecológica, así como el uso de prácticas sostenibles para combatir el cambio climático en Bolivia y en el planeta.
Nació en 2019, a iniciativa de 5 fundadores, quienes a partir de una cruzada de limpieza en un cerro de la zona de Irpavi se percataron de la problemática ambiental que representa para el municipio y para Bolivia la manera en que se desechan los plásticos, pese a los esfuerzos realizados por la municipalidad. A raíz de ello, decidieron formar una organización que desarrolle proyectos con enfoque económico, social y ambiental, según dio a conocer Mallea a Bolivia Verifica.
Fue así que Pro Pacha presentó el proyecto “Rehabilitación de las gradas del Prado” al programa municipal Ciudad de Mil Colores, cuyos directivos le dieron el visto bueno. El plan a futuro es seguir trabajando juntos en el embellecimiento y mejora de diversos puntos de la ciudad, con múltiple impacto.
Sobre la encuesta de seguridad del GAMLP
La sexta Encuesta de Victimización y Percepción de Seguridad en la Ciudad de La Paz 2021 (EVPS) analiza: delitos que sufrieron las personas, percepción de seguridad, lugares peligrosos y situaciones en las que se percibe mayor inseguridad.
Según señala el documento y debido a su nombre: “La victimización alude al suceso mediante el cual una o varias personas son víctimas de un fenómeno delictivo, sea a través del uso de la fuerza o no, evento que podría derivar en un daño físico, psicológico, económico y social. Generalmente las víctimas de un hecho delictivo perciben mayores niveles de inseguridad frente a aquellas personas que no tuvieron la experiencia de victimización”.
El coordinador del Observatorio Municipal de Seguridad Ciudadana, Hermógenes David Carrillo, aclaró que la encuesta se desarrolló bajos criterios de las Naciones Unidas, validados desde el GAMLP y adecuados al contexto local, considerando el Código Penal y la realidad sociocultural.
Este reportaje fue elaborado en el marco del proyecto de apoyo a la investigación periodística, enmarcado en Periodismo de Soluciones (PdS), desarrollado por la Fundación para el Periodismo y Bolivia Verifica con el apoyo de la National Endowment for Democracy (NED).